Hanuman, el dios mono, es venerado como divino, pero los monos ya no están protegidos por la Ley de Protección de la Vida Salvaje.
Ahora se consideran animales callejeros. El NDMC y otros municipios los están capturando y reubicando en zonas forestales a las que pertenecen.
Los humanos son responsables de haber reducido su hábitat, pero los consideran una molestia.
Es necesaria una rehabilitación urgente.
