Hubo un tiempo en que los yaks vagaban salvajes por el Himalaya.
Hoy son raros porque han sido domesticados para producir leche, lana, carne y hacer senderismo.
Durante el Festival del Yak se utilizan yaks decorados para carreras.
También se sacrifican para las deidades tibetanas.
Sikkim y Ladakh ofrecen safaris en yak.
