Recordatorio Meditación de Buena Voluntad
“Las viejas costumbres están tan profundamente inculcadas, tan poderosamente alineadas con los antiguos espejismos de codicia y temor, con la dualidad deseos contra necesidades, que es necesario realizar primero un acercamiento abstracto al tema para comenzar a clarificar, en forma personal, nuestro pensamiento.
Las actitudes de posesión comenzaron en el momento en que fuimos educados para compartir “nuestros” juguetes con otros niños. Se nos decía: “compartan sus juguetes”. Aún hoy es raro que se le enseñe a un niño que un juguete está solamente en su custodia para usarlo todo el tiempo que quiera. No es necesario que renuncie al juguete sino solamente es preciso enseñarle que renuncie a su deseo de posesión, a su apego a la idea de que es suyo y de que puede hacer con él lo que quiera, para siempre. Raramente se le enseña al niño la responsabilidad de “custodiar” las cosas como algo opuesto a poseerlas. Al educar a nuestros niños en la necesidad de compartir para una libre circulación de todas las cosas esenciales, hacemos un verdadero comienzo para establecer un nuevo orden de valores.
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Que el *reinado* de la *Luz* , el *Amor* y la *Justicia* comience. Que haya paz en la Tierra y que empiece en nosotros mismos.
«Reemplazar de vieja y caduca noción de POSEER, por la de CUSTODIAR/ADMINISTRAR es una de las bases esenciales en la educación de las nuevas generaciones, junto con la enseñanza y el conocimiento de las LEYES UNIVERSALES que rigen la VIDA UNA en todos sus ámbitos y manifestaciones, para contribuir a la evolución de las nuevas generaciones humanas hacia el paradigma teosófico de FRATERNIDAD E IGUALDAD, siempre bajo el paraguas de una LIBERTAD , SAGRADA E IRRENUNCIABLE. Y bajo este nuevo contexto, ¿qué huecos les quedan a los dioses, las religiones, los políticos y los MIEDOS?»
A.B.
